viernes, 30 de julio de 2010

PARÉNTESIS



Nunca hubiéramos querido dar esta noticia, pero gracias a que esta crisis provocada por la voracidad del propio sistema capitalista y a que los primeros recortes gubernamentales se realizan siempre en cultura, la revista Hache desaparece (no sabemos si temporal o definitivamente).
Lo que más nos molesta es no haber podido publicar a los autores a los que ya les habíamos dicho que lo haríamos en este número 6; el listado es, cuando menos, interesante: Javier Moreno, Jordi Doce, Ana Pérez Cañamares, Elena Román, Vicente Muñoz Álvarez, Pedro Sánchez Martínez, Eva Vaz, Marta López Vilar, Luis Armenta Malpica, Paula Varela, Isabel Bono, Lur Sotuela, Roberto Terán, José Alcaraz, Luna Miguel, José Luis Piquero, Camilo de Ory, Lauren Mendinueta, David J. Calzado, Sergio C. Fanjul, Hasier Larretxea, Antonio Agredano, Victoria Lovell, Eduardo D'Anna y Héctor Berenguer. Habíamos recibido poemas que han terminado premiados o publicados a nivel nacional, poetas que publicaban con nosotros por primera vez y una pequeña muestra de poesía Rosarina.
Teníamos la idea de haber subido el número en pdf para que quien estuviera interesado pudiera descargarlo, pero algunos autores nos han comentado que se oponían a ver parte de su obra publicada de ese modo, y ya que parece que a la Consejería de Cultura no le apetece en demasía que en el año del centenario de su nacimiento se vea parte de la obra de Ramón Gaya (de quien habíamos conseguido algunos dibujos, apuntes apenas, para ilustrar este número de Hache) en una revista que ha sido reseñada en 'El País' y en 'El Mundo', pues cerramos el quiosco de momento y esperamos que lleguen tiempos mejores.
Para cualquier proyecto futuro, los primeros con quienes se contará es con los autores mencionados arriba.
Gracias a todos los que nos dieron cancha y apoyo y promoción.
Nos vemos pronto.

jueves, 20 de mayo de 2010

ÓSCAR CURIESES












Desde hace un par de meses tienen al alcance 'Dentro', publicado por la editorial Bartleby, el nuevo libro de Óscar Curieses, a quien tuvimos el placer de publicar en el número 4 de Hache.

Dejamos aquí uno de los poemas del nuevo libro de Óscar:

Tu nieve cuaja la almohada donde me sueño. Sé que el final está muy próximo, de ahí tu insistencia en mi recuerdo:

Aunque me pienses inútil ahora, en la vejez tomo conciencia de que el ser es únicamente lo que recuerda de sí mismo, y así, cuanto más recuerda más vive. Siempre vivimos de memoria, lo importante es sólo el predominio de la misma, la clase de recuerdo que nos vive:

Mi nieve cuaja la almohada donde te sueño. Sé que el final está muy próximo, de ahí mi insistencia en tu recuerdo




P.D. La fotografía y el poema están extraídos del blog de Tucumán (gracias).

miércoles, 21 de abril de 2010

CRISTINA MORANO










Cristina Morano, la diseñadora y maquetadora de Hache, y en verdad más del 50% de la revista, comienza a ver los frutos de una temporada de silencio poético. Si quieren ver lo que es POESÍA (sí, con mayúsculas) pueden acercarse este viernes 23 de abril a las 19.00 h. a la FNAC de Callao (en Madrid) a la presentación de 'La manera de recogerse el pelo. Generación blogger', antología coordinada por David González, prologada por José Ángel Barrueco y editada por Bartleby; antología en la que aparece Cristina Morano junto a Silvia Oviedo, Ester García Camps, Gloria Gil Romera, Déborah Vukušić, Lucía Fraga, Ana Vega, Nuria Mezquita, Ana Pérez Cañamares, Inma Luna, Begoña Paz, Isabel Bono y Lola Lugo.



















Si les vienen mal la fecha y/o la hora, pueden acercarse el sábado 24, a las 12 del mediodía, a la librería arrebato a la presentación del libro 'El arte de agarrarse', libro que acaba de editarle a Cristina la editorial cordobesa La Bella Varsovia.

Dejo aquí uno de los poemas de ese libro.


DIBUJO DEL MUNDO

Todas las mañanas hay un gato
desde el amanecer recorriendo la casa
paso a paso, invisible a mis oídos,
apurando el borde de los muebles,
oliendo atentamente suelo y ropa.

Mide así su territorio, lo sabe, lo calcula;
su trayectoria es el mundo, o mejor
el mapa dibujado del mundo.

Cuando yo me levanto me lo entrega,
acerca su cabeza a mis rodillas
y me traspasa de su lomo
la propiedad del universo:
la casa apaciguada y puesta en orden
del notario.
xxxxxxxxxxxDespués se da la vuelta
y se alimenta de restos de carne
como un depredador salvaje.

sábado, 10 de abril de 2010

LOS 'ATRACTORES EXTRAÑOS' DE JAVIER MORENO































Desde enero está en la calle el último libro de Javier Moreno: 'Atractores extraños'. Un libro de relatos (parte de la Colección Imaginatio de la editorial InÉditor) con una ingente cantidad de conocimientos científicos, literarios, artísticos, filosóficos y teóricos a sus espaldas, pero resueltos con una sencillez magistral.
Javier, que publicó con nosotros en los números 1 y 3 de la revista, ha sido una de las personas que más y mejor ha hablado de Hache, por eso queremos dejar, por primera vez, un relato en el blog.


THE BABY AND THE SATELLITE

xLa furgoneta deja la autopista, avanza un par de kilómetros a través de una carretera comarcal y después gira a la derecha para tomar un camino de tierra. Finalmente se detiene junto a un campo de arroz. Yukio, el conductor, echa el freno de mano y deja el motor encendido. A través del parabrisas pueden verse los primeros rayos del amanecer. En el lateral de la furgoneta de color amarillo se lee en grandes caracteres rojos: FAST TRYP: RENT A CAR. Junto a las letras aparece el dibujo de un satélite tipo Sputnik.

-Qué os parece el sitio -dice Yukio.

-Muy bien -responde Makiko a su espalda, sentada en una de las dos filas de asientos de pasajeros del Mitsubishi.

-Como cualquier otro -añade Matsuo, sentado atrás junto a Makiko.

-¿Y a ti, Megume?

xMegume, en el asiento del copiloto, guarda silencio. Observa con detenimiento un par de garzas que picotean hundidas en el fango, apenas a un centenar de metros de la furgoneta.

-Aunque hubiese preferido una furgoneta de color azul. ¿Sabéis?, el azul es mi color favorito.

xxYukio sale de la furgoneta, camina hasta la parte de atrás del Mitsubishi y abre la puerta trasera. Después de un par de minutos vuelve a cerrar la puerta y regresa al asiento del piloto.

-Listo –dice, girándose y sonriendo a los pasajeros.

Megume sigue absorta en la contemplación de las garzas.

-¿Durará mucho? -pregunta Matsuo.

-Quince minutos, más o menos -respondeYukio.

-¿Sabéis? -dice Makiko- Hoy es mi cumpleaños.

-Felicidades -gritan a coro los chicos.

-¿Por qué no pones algo de música? -pregunta Matsuo.

-De acuerdo, ¿qué preferís?

-No sé, cualquier cosa.

-¿Tienes ese CD de Micah P. Hinson? -pregunta Makiko-. Sería perfecto.

-Desde luego -dice Matsuo.

-Creo que está por aquí.

xxYukio abre la guantera, saca un estuche de cedés y busca en su interior. Coge un disco y lo introduce en el reproductor. Suena la música.

-Qué bueno -dice Makiko.

-Perfecto -añade Matsuo.

Mientras tanto, Megume ha sacado el móvil y escribe un mensaje.

-¿Para quién es eso? -pregunta Yukio.

xMegume guarda silencio.

-Para quién es eso, te digo.

-Para mi madre -responde Megume.

-No deberías hacerlo -dice Yukio.

Megume continúa pulsando las teclas del móvil.

-Habíamos decidido deshacernos de todos los aparatos -sigue Yukio-. Siempre tienes que joderlo todo.

-Déjala, Yukio, no es momento de discutir.

-Es fantástico -dice Makiko, concentrada en la música. Respira hondo.

-¿Es mejor hablar o guardar silencio? -pregunta Matsuo.

-Da lo mismo, creo -responde Yukio.

-Pues entonces prefiero seguir hablando.

xMegume guarda el móvil en su bolso. Un bolso tan grande que casi podría meterse dentro, con dos peluches colgando de las asas. Uno de Micky Mouse y otro de Pluto.

-¿Has acabado ya? Perfecto.

-Si queréis que os confiese una cosa. Yo os creía la pareja perfecta -dice Matsuo.

-Apenas hace dos horas que nos conocemos y te permites sacar conclusiones.

-Lo digo por el viaje, y después en el restaurante. Habéis pedido lo mismo. Vosotros dos, se os ve, hacéis buena pareja. ¿No crees, Makiko?

xMakiko está con los ojos cerrados, ausente, preocupada tan sólo de respirar profundamente. Megume mira otra vez por la ventanilla. Las garzas han desaparecido. Siente no haberlas visto levantar el vuelo. Lo siente de veras.

-Oye -dice Matsuo-, creo que deberíamos chocar las manos, darnos un beso. Algo así.

-Estoy de acuerdo -dice Yukio, tendiendo una mano a Matsuo.

-¿Qué tal un beso, Makiko?

-Bueno, siempre quise besar a un desconocido.

Se besan. Se ríen.

Yukio acerca su rostro al de Megume, que continúa mirando a través de la ventanilla.

-Por los viejos tiempos -dice Yukio.

Megume se vuelve, mira a Yukio durante un instante y se gira de nuevo.

-No debería haber rencor entre nosotros, no en este momento.

-No es rencor -dice Megume sin despegar la mirada de la ventanilla-. Sencillamente no me apetece.

-¿A qué te dedicas? -le pregunta Matsuo a Makiko.

-¿Qué importa eso?

-Me gustaría saberlo. Al fin y al cabo nos hemos besado.

Makiko sonríe.

-Soy cajera en un supermercado.

-¿Dónde?

-En Kobe.

-¿Y tú?

-Yo soy programador informático.

-Estupendo. ¿Y vosotros?

Yukio y Megume permanecen en silencio. Como si no hubiesen escuchado la pregunta.

-Soy profesora -dice finalmente Megume-. Niños de cuatro a diez años.

-¿Y tú, Yukio? -pregunta Matsuo.

-Tengo mi propia empresa -responde Yukio mirando el retrovisor.

Toses de Megume.

-¿Cuánto tiempo ha pasado? -pregunta Matsuo.

Yukio mira el reloj de la furgoneta.

-Cinco minutos.

-¿Sabéis? -dice Makiko-. Estoy encantada de haberos conocido. Aunque sea de este modo. Hace años que no me encontraba tan bien. No se me ocurre mejor manera de celebrar mi cumpleaños.

xxMatsuo mira a Makiko intentando obtener algún tipo de deducción. Algo que explique su euforia. Luego tose, hasta cuatro veces.

-¿Y qué tal el negocio? -pregunta Matsuo cuando logra recuperarse.

Yukio mira a Matsuo a través del retrovisor.

-Mal. Los hombres son imbéciles. La especie es imbécil...

-Hasta el universo es imbécil -añade Matsuo.

-Ahí te equivocas. El universo es perfecto. El universo es lo que hay. Y eso está bien.

Se gira. Mira directamente a Matsuo.

-El mayor defecto del hombre consiste en que es un mal conductor de la realidad.

-Ya -dice Matsuo, sin convicción-. Es una buena teoría.

-No es una teoría. Es la realidad. Esta canción, por ejemplo.

Matsuo escucha en silencio, buscando una explicación a las palabras de Yukio.

-Es fantástica -insiste Makiko.

-Es una mierda -dice Yukio-. Una impostura. Una burda imitación de una situación real. La nuestra.

-Pues a mí me gusta.

Makiko no parece dispuesta a rendirse.

-Una prueba de tu carácter sentimental -añade Yukio; y tuerce los labios en una mueca sarcástica.

xMegume ha sacado mientras tanto un pequeño cuaderno del bolso y anota algo en él con un lápiz moteado de purpurina fucsia.

-¿Se puede saber qué coño haces? Quedó claro que no dejaríamos ninguna nota. ¿Te has empeñado en joderlo todo, o qué?

xMegume no se inmuta. Sigue moviendo el lápiz. De vez en cuando levanta la vista y observa el paisaje al otro lado de la ventanilla. Yukio acerca su cabeza al cuaderno y ve un dibujo. En él aparece el campo de arroz y el pico de lo que parece una garza.

-La pareja perfecta, lo que yo decía -dice Matsuo riendo. Ríe con ganas, exageradamente. Después tose.

-¿Problemas? -pregunta Makiko.

-No, estoy bien. Es el asma. Siempre tuve problemas para respirar.

-Sin embargo, para mí es como un pedo enorme. Siento que me adormezco.

-Intenta no dormirte. No me gustaría quedarme sin conversación -tose, de nuevo-. Supongo que es el momento de hacer lo que más nos gusta. A mí, hablar, desde luego. ¿Y a ti?

-Flipar, eso es lo que más me gusta. Y la música.

-Y a ti pintar, ¿no, Megume?

Megume continúa dibujando, en silencio.

-Lo hace sólo por fastidiar. Para no decir lo que piensa en realidad. Megume odia pintar. Siempre ha sido una pésima dibujante.

xMatsuo se coloca al borde del asiento y estira la cabeza para mirar el dibujo de Megume.

-Eh, qué se supone que son esos bichos, ¿cigüeñas?

-Garzas, son garzas -dice Megume.

-Parece que Yukio tiene razón. Somos pésimos conductores de la realidad.

xMatsuo vuelve a tumbarse sobre el asiento. Makiko tararea la letra de la canción. Repite the dream you left behind, the dream you left behind mientras de sus ojos brota un torrente de lágrimas.

-¿Triste? -pregunta Matsuo.

-No, simplemente escuecen -dice, llevándose la mano a los ojos.

xEn la parte de delante de la furgoneta tose Yukio. Tan fuerte que casi acaba golpeando con la cabeza el salpicadero.

-Ya queda menos -dice Matsuo. Y tose él también-. Oye, todavía no me has dicho qué es lo que más te gusta hacer.

Yukio mete primera y acelera a fondo sin levantar el pie del embrague.

-Exprimir al máximo un coche.

-¡Uao!, como en una disco -grita Makiko. Y agita la mano como si espantase un insecto molesto.

-Eh, vale tío, no es necesario que precipites las cosas.

Yukio levanta el pie del acelerador y vuelve a poner el punto muerto.

-Era sólo una broma.

xMakiko se ha ido acercando poco a poco. Ahora agarra a Matsuo por la cintura mientras sus ojos siguen llenos de lágrimas. Tose. Wasted away... Tararea. Tose. Tararea.

El lápiz de Megume se ha detenido sobre el bloc de notas.

-Y vosotros -tose-. Me gustaría saber... -tose-. Por qué hacéis esto. ¿Estuvisteis de acuerdo? ¿Convenciste a Megume?

xYukio mira a Megume. El lápiz se ha deslizado de su mano abierta y ha ido a parar a la alfombrilla. Su cabeza descansa apoyada contra el cristal de la ventanilla. Echa un vistazo al cuaderno. Faltan las patas de las garzas, que parecen flotar sobre el arrozal. Después se gira y se inclina para evitar el reposacabezas.

-Otra vez te equivocas. Fue ella la que me lo propuso -dice mientras intenta detener la tos con un puño cerrado sobre la boca.

xMatsuo quiere decir algo, pero la tos ahoga las palabras en su garganta. Yukio extiende el brazo en silencio y coge en su mano la de Megume. A su espalda escucha la tos ininterrumpida de Matsuo, que acaba en una especie de ahogo. A través del retrovisor ve al chico agazapado junto al cuerpo de Makiko. Una imagen que acaba empañada por el humo y las lágrimas. Lo último que escucha es el pitido del móvil de Megume. Alguien acaba de mandar un mensaje.

sábado, 27 de marzo de 2010

RAQUEL LANSEROS



















Desde hace ya varias semanas anda Raquel Lanseros, que publicó con nosotros en el número 4 de Hache, presentando este libro que se llevó el XIII Premio Internacional de Poesía 'Antonio Machado en Baeza'.

Dejamos aquí dos poemas de ese libro; además, dos poemas que han sido escogidos por la propia Raquel.


A LAS ÓRDENES DEL VIENTO
xxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxPara todos los que sienten que no están al mando

Me habría gustado ser discípula de Ícaro.
Hubiera sido hermoso festejar
xxxxxxxxxxxxxxxlas bodas de Calixto y Melibea.
Me habría gustado ser
xxxxxun hitita ante la reina Nefertari
xxxxxel joven Werther en Río de Janeiro
xxxxxla deslumbrante dama sevillana
xxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxpor la que Don José rechazó a Carmen.

Yo quisiera haber sido el huerto del poeta
xxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxcon su verde árbol y su pozo blanco
xxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxel inspector fiscal
xxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxcon el que conversara Maiakovski.


Me habría gustado amarte. Te lo juro.


Sólo que muchas veces la voluntad no basta.




IN NOMINE LIBERTATIS

Si es verdad que el rencor
desgasta y envejece lentamente
xxxxxcon su rumor callado de piedra de molino
apuesto por ser joven ahora y siempre.

Mi casa está vacía
xxxxxde chivos expiatorios y culpables.
Acumulo tan sólo
el valor necesario para seguir viviendo
bajo la protección de la alegría.

No me he inclinado nunca por el ánimo fácil
de tomar y obligar. Incluso lo pequeño
se me ha antojado siempre un mecanismo frágil
xxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxcon más de una respuesta.

En mi alcoba no reinan
prohibiciones ni leyes. Mi palabra
es un patio sin llave
donde es bien recibido quien aprecie
la sombra de una higuera y un vaso de buen vino.

No frecuento los presos ni los jueces.
Sentencias y dictámenes les dejo
a aquellos que no dudan. Yo sólo estoy segura
que amo la libertad y sus orillas.

Cuando falte, buscadme entre las alas
de un pájaro que escapa del invierno.
Con las manos vacías se hace mejor camino.
No me pesan los créditos. En este mundo nuestro
toda deuda es de juego.


miércoles, 27 de enero de 2010

ANTONIO LLORENTE ABELLÁN


















Antonio Llorente, que publicó con nosotros en el segundo número de Hache, acaba de ver publicado su tercer libro en la editorial Huerga y Fierro, en una colección dirigida por Antonio Marín Albalate.

Dejamos aquí uno de los poemas de 'Herida', que es el título del libro.


COORDENADAS

Habrá que hacer loa de cualquier cosa.

De la mera contemplación hacer poesía.

Lo mismo ha de dar una nube que un amor,
o la emoción de contemplar un cántaro,
qué cosas...

Y es que hay que rastrear lo sublime,
hacerlo brotar entre las líneas de los versos.
Parece que ahora importa más el papel en blanco
que el sordo rumor de un corazón desmoronado
o el de un alma arrugada en el ocaso
porque siente con el día morirse el mundo.

Hoy hay que hacer poesía de memoria
y medir bien los versos, hacer trampas,
no decir la verdad aunque nos mate,
tanta sinceridad, tanto ripio disfrazado
de soneto matemático y puro.

Poetas de la elegía nos dicen
los poetas sordos y cerebrales
porque no saben escuchar el dulce temblor
de todo lo que vive camino de la muerte.

No saben de las ansias,
no saben del origen
silencioso y turbio
de cada canción que les suena hermosa.
No saben nada de la vida ni han entendido
apenas ningún libro.

Hay que ser como ellos, agasajar
las conciencias de este mundo dormido.

Y ni un llanto, por favor, ni una pena,
y no hablar del yo, que a nadie importa.

Mejor las nubes, las aves, los cántaros,
y todo muy discretamente, y muy bien medido
sin hacer ruido, por dios, que nadie se moleste.


martes, 12 de enero de 2010

NUEVA RESEÑA DEL NÚMERO 5 DE HACHE


















Mientras esperamos que se solucionen los problemas que han impedido que desde hace algunos meses esté el número 6 de Hache en la calle, agradecemos que Mario Paz González nos haya enviado la reseña que del número 5 le ha publicado 'Lectura y signo', la revista de estudios literarios de la Universidad de León.